Bargueño

El bargueño es un mueble de origen español, fabricado entre los siglos XVI al XVIII, concebido para escribir o archivar papeles, y apto para poder ser transportado a lomos de una mula o burro. Los ejemplares lujosos pueden tener acabados en pan de oro y estar adornados con marfil, concha u otros trabajos de taracea. El nombre es de origen incierto, coincidiendo con el gentilicio de los habitantes del pueblo de Bargas en la provincia de Toledo (España). En otras lenguas europeas, estos muebles o sus émulos se denominan "cabinet" (en francés, inglés, alemán, portugués e italiano) y forman conjunto con los muebles de escritorio.

El bargueño es un mueble de madera con muchos cajones pequeños y gavetas, adornado con labores de talla o de taracea, en parte dorados y en parte de colores vivos, al estilo de los que se construían en Bargas. Puede presentarse con otros nombres como “arquimesa”, contador, escritorio, mueble papelera, bufete o bufetillo. Por lo general, en su parte superior posee una tabla desplegable con bisagras para escribir. La característica principal del bargueño es que dispone de múltiples cajones de diferente tamaño, gavetas y departamentos, algunos de ellos con mecanismos de acceso secretos, y todo ello ricamente adornado. Esto lo convierte en un mueble versátil que puede utilizarse como archivo o contenedor de objetos diversos y valiosos.

Definición y características del bargueño

El bargueño es descrito como un mueble de madera con muchos cajones pequeños y gavetas, adornado con labores de talla o de taracea, en parte dorados y en parte de colores vivos, al estilo de los que se construían en Bargas. Puede presentarse con otros nombres como “arquimesa”, contador, escritorio, mueble papelera, bufete o bufetillo. Por lo general, en su parte superior posee una tabla desplegable con bisagras para escribir. La característica principal del bargueño es que dispone de múltiples cajones de diferente tamaño, gavetas y departamentos, algunos de ellos con mecanismos de acceso secretos, y todo ello ricamente adornado. Esto lo convierte en un mueble versátil que puede utilizarse como archivo o contenedor de objetos diversos y valiosos.

Tipos de bargueño

Existen dos tipos elementales de bargueño: aquellos con el frente abierto y los cajones a la vista, también conocidos como mueble "contador", y aquellos con tapa abatible que al abrirse hacen las funciones de escritorio. Siempre está separado del soporte, formando un conjunto único. En sus inicios, era un mueble transportable que llevaba asas en los laterales y podía cargarse en un équido. En cuanto al apoyo del mismo, hay tres tipos de asentamiento o sujeción: mesa de pie de puente, soporte o mesa con fiadores, y bargueño del tipo credencia o "taquillón".

Origen y evolución del bargueño

El origen del bargueño se remonta al siglo XVI en España. En los inventarios del mueble español, el bargueño aparece en la tipología de "escritorios con tapa", "arquillas y arquilla contador sin tapa" y "arquimesas". Fue Juan Facundo Riaño quien lo denominó "bargueño" por primera vez en su Catálogo de objetos artísticos españoles en 1872. Aunque el origen del nombre es incierto, se ha asociado al gentilicio de los habitantes del pueblo de Bargas en la provincia de Toledo. A lo largo del tiempo, el término se ha difundido y aceptado como el nombre de este mueble español por excelencia.

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El bargueño tiene su origen en el arca de novia catalana del siglo XVI, que evolucionó a partir de las arquillas mudéjares de taracea. La relación de la Corona Española con el imperio alemán facilitó la exportación del mueble, que pronto fue imitado por los artesanos germanos, especialmente en Augsburgo. La producción alemana fue desplazando progresivamente al mueble original español, lo que llevó a Felipe III de España a prohibir la importación de escritorios de Alemania.

Conclusiones

El bargueño es un mueble de origen español fabricado entre los siglos XVI al XVIII, utilizado para escribir o archivar papeles. Es un mueble versátil con múltiples cajones y gavetas, adornado con labores de talla o taracea. Aunque su nombre tiene un origen incierto, se ha asociado con el gentilicio de los habitantes del pueblo de Bargas en Toledo. El bargueño es un mueble distintivo de la cultura española y ha sido imitado en otros países europeos.