La identificación y la autenticación son dos conceptos fundamentales en el ámbito de la seguridad. Ambos se utilizan para garantizar la protección de la información y prevenir el acceso no autorizado. Exploraremos en detalle qué significa cada uno de estos conceptos, cómo se relacionan entre sí y qué métodos se utilizan para llevar a cabo la identificación y la autenticación.
Identificación
La identificación es la acción de reconocer si una persona o cosa es la misma que se busca. En el contexto de la seguridad, la identificación es esencial para asegurarse de que una persona o entidad es quien dice ser. Algunos ejemplos de identificación incluyen:
- Verificar que los datos y la fotografía de una tarjeta de identificación coincidan con la persona que la presenta.
- Asignar diferentes niveles de acceso a usuarios identificados como administradores, empleados o invitados en un sistema informático.
La identificación también puede ser utilizada para agrupar o considerar como una misma a dos o más cosas distintas. Esto puede ser útil en el contexto de la seguridad para establecer niveles de acceso o permisos. Por ejemplo, en un sistema informático, se pueden asignar diferentes niveles de acceso a usuarios identificados como administradores, empleados o invitados.
Identidad
La identidad está estrechamente relacionada con la identificación. Se refiere al conjunto de rasgos propios de un sujeto o comunidad que los caracterizan frente a los demás. En el ámbito de la seguridad, la identidad es fundamental para establecer la confianza y la autenticidad de una persona o entidad.
Autenticación
La autenticación es el proceso de verificar la identidad de un individuo o entidad. Se utiliza para prevenir el acceso no autorizado y garantizar la protección de la información. Algunos métodos comunes de autenticación incluyen:
Háptica- Autenticación basada en conocimiento: Verificación de información que solo el usuario debe conocer, como contraseñas, preguntas de seguridad o códigos secretos.
- Autenticación basada en posesión: Verificación de la posesión de un objeto físico, como una tarjeta inteligente, una llave de seguridad o un token de autenticación.
- Autenticación basada en características físicas: Verificación de características físicas únicas de un individuo, como huellas dactilares, reconocimiento facial o escaneo de iris.
- Autenticación basada en comportamiento: Verificación de patrones de comportamiento únicos de un individuo, como la forma de escribir, el ritmo de tecleo o la voz.
Es importante destacar que la autenticación no es un proceso único, sino que puede involucrar múltiples factores o capas de seguridad. Esto se conoce como autenticación multifactorial o de múltiples factores, y se utiliza para aumentar la seguridad y reducir el riesgo de acceso no autorizado.
Autenticación multifactorial
La autenticación multifactorial o de múltiples factores implica el uso de múltiples métodos o factores de autenticación para aumentar la seguridad y reducir el riesgo de acceso no autorizado. Por ejemplo, se puede requerir una combinación de contraseña y huella dactilar para acceder a una cuenta o sistema.
Conclusiones
La identificación y la autenticación son conceptos fundamentales en la seguridad. La identificación implica reconocer si una persona o cosa es la misma que se busca, mientras que la autenticación implica verificar la identidad a través de pruebas o evidencias. Ambos conceptos se utilizan en diferentes contextos y niveles de seguridad, y pueden involucrar diferentes métodos y factores de autenticación.