Las personas con discapacidades visuales enfrentan diversos desafíos en su vida diaria, adaptándose a un mundo predominantemente enfocado en el sentido de la vista. Una de estas dificultades es el término «invidente», el cual suele ser malinterpretado o utilizado incorrectamente. En este artículo, profundizaremos en el verdadero significado de este concepto, su origen y cómo se utiliza en la sociedad actual. Acompáñanos a explorar el mundo de las personas invidentes y desmitificar prejuicios y estereotipos en torno a esta discapacidad.
Definición de invidente
La noción de invidente se emplea para aludir a la persona que no puede hacer uso del sentido de la vista. Alguien invidente, por lo tanto, es ciego: no está en condiciones de ver. Por algún tipo de anomalía, daño o defecto en su vista, el invidente no consigue percibir correctamente el mundo que lo rodea a través de los ojos. La ceguera puede ser parcial o total dependiendo del grado de discapacidad. Habitualmente se denomina invidente o ciego a quien carece totalmente de visión o apenas consigue percibir la luz, pero no puede apelar a la visión para adquirir conocimientos. Por otro lado hay individuos que son ciegos parciales, que tienen baja visión o que son limitados visuales.
Recursos y herramientas para los invidentes
Para minimizar el impacto de la discapacidad, los invidentes cuentan con diversas herramientas y recursos que facilitan su integración social y sus interacciones. Algunos de estos recursos son:
- Braille: sistema de escritura y lectura basado en signos con relieve que son percibidos mediante el tacto.
- Perros guía: animales de asistencia entrenados para asistir a los invidentes en sus desplazamientos y brindarles ayuda.
- Bastón blanco: utilizado por los invidentes para detectar obstáculos al caminar por la vía pública.
El braille es un sistema de escritura y lectura táctil utilizado por las personas invidentes. Consiste en una serie de puntos en relieve que representan las letras del alfabeto, los números y otros símbolos. Los invidentes pueden leer el braille pasando sus dedos sobre los puntos y sintiendo su forma. Este sistema les permite acceder a la información escrita y comunicarse de manera independiente.
Los perros guía son animales especialmente entrenados para asistir a las personas invidentes en sus desplazamientos. Estos perros son capaces de guiar a sus dueños de manera segura, evitando obstáculos y ayudándoles a encontrar el camino. Además, los perros guía brindan compañía y apoyo emocional a las personas invidentes, lo que les ayuda a mejorar su calidad de vida.
El bastón blanco es una herramienta utilizada por los invidentes para detectar obstáculos al caminar por la vía pública. Este bastón, que suele ser de color blanco, les permite explorar el entorno y detectar posibles peligros, como escalones, bordillos o personas. Al deslizar el bastón por el suelo, los invidentes pueden identificar cambios en la superficie y anticiparse a los obstáculos.
Infraestructuras para personas invidentes
Es importante crear un entorno en el cual las personas invidentes puedan desenvolverse con comodidad. Algunas infraestructuras que se pueden implementar son:
- Emisores de sonido en semáforos: traducen en sonido las señales que los semáforos emiten por medio de las luces, permitiendo a los invidentes saber si los coches se encuentran avanzando o detenidos para cruzar.
- Variaciones en las baldosas de las veredas: protuberancias de forma circular o rectangular dispuestas de manera que la persona invidente pueda descodificar un mensaje al pasar sobre ellas.
Los emisores de sonido en los semáforos son dispositivos que permiten a las personas invidentes saber cuándo pueden cruzar la calle de manera segura. Estos dispositivos emiten un sonido específico cuando el semáforo está en verde para los peatones, lo que indica a los invidentes que pueden cruzar sin peligro. De esta manera, se facilita la movilidad de las personas invidentes y se garantiza su seguridad en las vías públicas.
Las variaciones en las baldosas de las veredas son otra infraestructura que facilita la movilidad de las personas invidentes. Estas baldosas, que suelen tener una textura diferente al resto de las baldosas, se colocan estratégicamente en el suelo para indicar a los invidentes la dirección a seguir o la presencia de obstáculos. Por ejemplo, las protuberancias de forma circular pueden indicar un cruce de peatones, mientras que las protuberancias de forma rectangular pueden indicar la presencia de una rampa o un obstáculo en el camino.
Autosuficiencia de las personas invidentes
Las personas invidentes pueden adquirir un alto grado de instrucción que les permite moverse con soltura por las calles, estudiar una carrera universitaria y conseguir un trabajo, entre otras cosas. No se debe considerar que necesitan la ayuda de quienes tienen una visión normal en todo momento, ya que pueden desarrollar un nivel de autosuficiencia casi completo. Sin embargo, un gesto de ayuda cuando realmente lo necesitan es muy valioso y seguramente será agradecido con una sonrisa.
Es importante destacar que las personas invidentes pueden desarrollar habilidades y capacidades en otras áreas para compensar su falta de visión. Por ejemplo, pueden desarrollar una audición más aguda y ser capaces de reconocer sonidos y voces con mayor precisión. También pueden desarrollar habilidades táctiles y ser capaces de identificar objetos y texturas a través del tacto.
El término invidente se refiere a la persona que no puede hacer uso del sentido de la vista. Los invidentes pueden ser ciegos parciales, con baja visión o limitados visuales. Para facilitar su integración social y sus interacciones, cuentan con recursos y herramientas como el braille, los perros guía y el bastón blanco. Además, es importante crear infraestructuras que les permitan moverse de manera segura, como los emisores de sonido en los semáforos y las variaciones en las baldosas de las veredas. A pesar de su discapacidad, las personas invidentes pueden desarrollar un alto grado de autosuficiencia y llevar una vida plena y satisfactoria.